CHINA: Surge ahora la revolución agri-cultural

El camino bordeado de álamos blancos que conduce al pabellón de visitantes se aparta de la autopista principal 50 kilómetros al sur de Beijing, tras cruzar huertas, campos de arroz y establecimientos avícolas.

En un país de tradiciones socialistas donde el resto de la nación siempre recibió la orden de llenar cuotas y emular el brillante ejemplo dejado por héroes ideales del trabajo, Liuminying es una granja modelo.

Desde los días de la Revolución Cultural (1966-1976), cuando el Partido Comunista liderado por Mao Tse-tung envió millones de jovenes a las áreas rurales de China para "plantar grano en todas partes", Liuminying ha superado a otras granjas en términos de producción, cultivos diversificados y nuevas tecnologías.

Como respaldo de esas conquistas, Liuminying tambien fue un modelo de comuna socialista.

Tras adaptarse hábilmente a la era post-Mao, se convirtió en un ejemplo para el sistema de responsabilidad contractual que dió incentivos a los granjeros privados para producir más. En la actualidad, en la liberalizada China, es tambien un establecimiento agrícola que además ha creado una empresa mixta para exportar sacos de dormir y tiendas de campaña a Alemania.

Liuminying logró tal suceso que ahora cuenta con una sección separada para atender a los huéspedes. En la última década 190.000 visitantes locales y extranjeros recorrieron la granja.

Zhang Shanao tiene ahora 70 años y es un granjero retirado. "Nuestro éxito se debe al duro trabajo de los aldeanos para que Liuminying sea un modelo", dijo.

La reducida población de la aldea -900 habitantes- tiene un nivel de vida mucho más alto que el promedio nacional. No es difícil saber la causa porque el gobierno brinda apoyo total a la granja para que sirva de ejemplo y escaparate.

En el centro de visitantes, los funcionarios tabletean estadísticas: la granja produce 100.000 pollos anuales, 5.000 cerdos, 200.000 patos asados para los restaurantes de Beijing, 200.000 litros de leche y recientemente adquirió 30 camiones para comenzar una escuela de conducción de vehículos.

Sin embargo, lo más importante es que Liuminying es presentada actualmente como la respuesta china al desafío de alimentar la enorme población del país de 1.200 millones de personas, pero no por medio de intensivas granjas comerciales al estilo estadounidense sino con establecimientos ecológicos.

Las granjas ecológicas privilegian la energía solar utilizada por las plantas y promueven el reciclaje de nutrientes orgánicos. Emplean menos energía intensiva que no depende de fertilizantes y pesticidas, y son abastecidas por pequeños establecimientos que requieren baja inversión y son autosuficientes.

Los expertos afirman que son más sostenibles y no dañan el suelo.

"La agricultura ecológica ha transformado a Liuminying", dijo Bian Yousheng, un agrónomo que trabaja en el Instituto Municipal de Protección Ambiental en Beijing. "Además, es la respuesta para aumentar la producción de alimentos en todo el país".

La producción cerealera china aumentó notablemente despues de las reformas agrícolas, pasando de 200 millones de toneladas en 1977 a 300 millones en 1984. Desde entonces el crecimiento no fue tan fenomenal.

Como China debe alimentar a 15 millones de personas adicionales cada año y satisfacer el alto consumo de carne de nuevos ciudadanos prósperos, usa más grano cancelando así exitosas estadísticas pasadas. Para el 2030, el consumo cerealero llegara a 480 millones de toneladas, casi el doble del proyectado aumento de producción.

Despues de negativas iniciales, las autoridades chinas han comenzado a tomar en serio las sombrías previsiones de una crisis alimentaria en el país.

El informe pesimista difundido el año pasado en Washington por el Worldwatch Institute, que aseguró que China estaba perdiendo la capacidad de autoalimentarse, fue traducido y distribuido entre altos funcionarios.

No todos son pesimistas. La FAO indicó que los cultivos de arroz en China se duplicaron a seis toneladas por hectárea desde 1988 y pronosticó que podrían aumentar a ocho toneladas. Existe todavía gran potencial de tierras marginales que pueden ser cultivadas.

Si bien los terrenos agrícolas estan siendo devorados por las ciudades en expansión, autopistas y represas, China cuenta aún con 60 millones de hectáreas cultivables donde las cosechas pueden ser aumentadas con mejor irrigación.

Expertos chinos como Bian Yousheng están convencidos que la agricultura ecológica puede brindar altas cosechas en forma sostenida y además tener sentido económico.

En Liuminying, por ejemplo, casi nada se pierde. Incluso los excrementos humanos de las letrinas son inyectados en un gigantesco sistema de biogas que genera metano para las cocinas y la calefacción de la aldea.

La granja ha logrado ahorrar 100 toneladas anuales de carbón y ha reducido los fertilizantes químicos de 250.000 kilos por año en 1982 a menos de 70.000 kilos en 1995. El uso de pesticidas fue reducido al mínimo.

El verdadero desafío para el Instituto Municipal de Beijing de Protección Ambiental es repetir el suceso de Liuminying en otras aldeas remotas de China, en establecimientos privados y no solo en granjas colectivas.

"Hemos tratado de aplicar la lección de Liuminying en más de 1.600 granjas a través de toda China"o, dijo Bian Yousheng. (FIN/IPS/tra-en/kd/cpg/ego/dv).

= 08221656 DAP005

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe