El fiscal general de Venezuela, Iván Badell, alertó hoy a los 27.000 médicos del sector público en huelga general, que no brindar atención de emergencia es ilegal y que pueden ir presos si llega a morir un paciente.
Los profesionales de la medicina iniciaron este viernes una huelga indefinida, mientras el gobierno comenzó a militarizar los hospitales en manos del Estado y estudiaba decretar la reanudación de faenas, que fuerza el fin de la huelga a funcionarios públicos de servicios esenciales.
En tanto, la situación era de extrema tensión en los hospitales de la capital, y decenas de médicos eran retenidos por efectivos de fuerzas de seguridad.
La Federación Médica Venezolana inició al culminar este viernes una nueva asamblea para estudiar las observaciones del fiscal, el garante de la legalidad, en un encuentro especial con el presidente del gremio, Fernando Bianco, y otros dirigentes.
Los médicos exigen en la práctica una cuadriplicación de sus salarios y la dotación de las instalaciones hospitalarias en manos del Estado, en medio del virtual colapso de la salud pública, a la que este año se destinó sólo 33 dólares per capita, frente a los 55 dólares de 1995.
Desde hace una semana, los médicos del sector público mantenían una parálisis parcial de actividades, pero desde este viernes suspendieron toda actividad, incluida la atención de emergencias, terapia intensiva, partos y pediatría. (FIN/IPS/eg/dg/lb-ip-he/96
