La X Cumbre de la Comunidad Andina (CA), que se realizará en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil el sábado y el domingo próximos, promoverá nuevas definiciones en materia de integración zonal y de relaciones con otros bloques comerciales.
El presidente ecuatoriano Fabián Alarcón, anfitrión de la X Cumbre, pronosticó acuerdos concretos en una reunión que se realiza tras quedar atrás los problemas que obstaculizaron la integración entre Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela, los cinco países miembros de la CA.
Alarcón destacó que las conversaciones de la CA con el Mercado Común del Sur (Mercosur) se encaminan a la etapa de mutuo desarme arancelario y que Perú ha resuelto "prácticamente" sus diferencias con el bloque andino.
"Somos un grupo con 30 años de existencia, el más antiguo de América Latina, y tenemos que estar en la vanguardia del proceso de integración en el continente", manifestó Alarcón, quien encabeza la comisión presidencial andina.
La CA congrega a 104 millones de habitantes y su producto interno global excede los 220.000 millones de dólares.
La cita andina comenzó este miércoles con las reuniones preliminares de los cancilleres y los ministros y viceministros encargados de asuntos económicos, que discutirán hasta el viernes los temas que serán aprobados por el Consejo de presidentes.
Uno de los asuntos más relevantes que encara la CA se refiere al proceso hacia la liberalización del comercio con el Mercosur, conformado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, aunque no consta como punto específico en la agenda de la cumbre de Guayaquil.
La CA y el Mercosur firmarán el día 16 en Buenos Aires un acuerdo marco de negociaciones de libre comercio, tras superar las diferencias manifestadas en la reunión que mantuvieron en diciembre.
El acuerdo marco que se firmará en la capital argentina "establece que cada país de la CA se hará cargo de sus propios intereses frente al Mercosur", explicó el canciller venezolano Miguel Angel Burelli.
"Cada país tiene su sensibilidad, en cuanto a producción se refiere, y de acuerdo con ella" programará su asociación con el Mercosur, "siempre dentro del acuerdo marco", agregó Burelli.
En el acuerdo se anuncia la inauguración en 20 meses de la zona de libre comercio entre los dos bloques que, según el venezolano Sebastián Alegrett, secretario general de la CA, será "el pilar del ALCA", el Area de Libre Comercio de las Américas.
Los jefes de Estado y de gobierno de 34 países de América (sólo Cuba está excluida) lanzarán el 19 de este mes en Santiago de Chile las negociaciones para la conformación del ALCA.
La cumbre de Guayaquil abordará la creación de un mercado común andino, una meta que exige la revisión de la unión aduanera y del libre comercio intrazonal, y la armonización de las políticas macroeconómicas.
Según Alegrett, en la reunión se definirán las directivas para la constitución del mercado común, "que es algo esencial, porque hacia él está encaminado nuestro programa de trabajo".
A principios de marzo, los minsitros de Economía de los países andinos se reunieron en Quito para discutir los mecanismos que permitan la armonización de las políticas macroeconómicas.
Los ministros identificaron la disparidad de los índices inflacionarios como el principal problema a abordar en la búsqueda de la armonización macroeconómica.
En la reunión de Quito se propuso la reducción gradual de la inflación de cada país a menos de 10 por ciento, algo que resulta un verdadero desafío para Venezuela y Ecuador, que en 1997 presentaron índices anuales de 37,6 y 30,7 por ciento, respectivamente.
En el mismo período, la inflación en Colombia llegó a 18 por ciento, en Bolivia a 8,2 y en Perú a 6,4 por ciento.
Ecuador y Venezuela, los mayores exportadores de crudo de América del Sur, enfrentan este año serias dificultades económicas por la caída internacional del precio del petróleo que, según analistas, perjudicará el esfuerzo por reducir la inflación.
"Igualar las tasas de inflación es una condición para que la construcción de un mercado común se desarrolle con rapidez y normalidad", pues una tasa elevada en un país "repercute en los otros", dijo Enrique García, presidente de la Corporación Andina de Fomento.
García reconoció que ese "no es un proceso sencillo", pues una reducción drástica de la inflación produciría recesión económica y desempleo.
En Guayaquil también se definirá el proyecto de reforma del financiamiento de la comunidad, que está inspirado en el modelo de la Unión Europea.
El actual sistema de financiamiento, vigente desde hace 30 años, está basado en las aportaciones de cada país y, según el secretario general de la CA, es irregular e ineficiente.
El nuevo sistema establece un impuesto al comercio intrazonal y "permitirá el financiamiento de todas las instituciones de la CA".
Alegrett recordó que en 1997, el intercambio comercial entre los países de la CA alcanzó los 5.800 millones de dólares y predijo que este año será superado ese listón. (FIN/IPS/mg/ff/ip if/98
