GRECIA: Se afianza la violencia política

Una ola de violentos disturbios y ataques de extremistas, tanto de derecha como de izquierda, ha sacudido la capital de Grecia desde que un policía mató a tiros el 5 de diciembre al estudiante Alexandros Grigoropoulos, de 15 años.

Los incidentes abrieron paso a una ola de movilizaciones políticas. Casi a diario se realizan manifestaciones en Atenas y otras ciudades, mientras distintos grupos se enfrentan con el gobierno y las fuerzas de seguridad por asuntos antes ignorados.

Con frecuencia hay pequeños choques entre policías y jóvenes.

La agitación política se ha visto gradualmente ensombrecida a causa de disturbios provocados por grupos extremistas no identificados.

Días después de la muerte de Grigoropoulos, otro estudiante recibió un disparo en su mano en Peristeri, el mayor distrito residencial de la capital. Nadie fue arrestado por eso.
[related_articles]
El 5 de enero, dos personas lanzaron una granada y abrieron fuego contra la policía antidisturbios en Exarxeia, el mismo barrio donde fue asesinado Grigoropoulos y que es notorio por su intensa actividad política.

El policía Diamadis Matzounis, de 21 años, resultó herido en el ataque.

La organización Lucha Revolucionaria se atribuyó el atentado. Este grupo había realizado varios ataques en Atenas, entre ellos el lanzamiento de un cohete contra la embajada de Estados Unidos en 2007.

Un mes después, en la noche del 3 de febrero, un grupo disparó contra una comisaría en el barrio de Koridallos, donde se encuentra la prisión más conocida de la capital griega. Un grupo que se identificó como Secta de Revolucionarios reivindicó el ataque.

El grupo también se responsabilizó del tiroteo del 17 de febrero contra las oficinas del canal de televisión privada Alter, en Atenas.

Al día siguiente, medio centenar de personas encapuchadas invadieron un seminario organizado por la Universidad de Atenas y atacaron al popular profesor de criminología Giannis Panousis y a otros miembros de la audiencia.

También sufrieron ataques abogados, fiscales y jueces involucrados en casos de violencia política y atentados.

Lucha Revolucionaria, Secta de Revolucionarios y otras organizaciones envuelven sus violentas acciones con una retórica izquierdista. En ese sentido, llaman a la sociedad a "despertar" y a resistirse contra la opresión del Estado.

Los medios de comunicación han realizado grandes coberturas sobre la reaparición de la violencia política de izquierda en Grecia.

Este país tiene una larga historia de insurgencias y atentados de naturaleza política, como los llevados a cabo por las organizaciones izquierdistas 17 de Noviembre y Lucha Popular Revolucionaria entre mediados de los años 70 y fines de los 90.

Ambos grupos fueron desmantelados luego de una investigación organizada con apoyo extranjero, especialmente de Gran Bretaña y Estados Unidos. Algunos miembros de los grupos cumplen cadena perpetua. Otros todavía están a la espera de la finalización de los juicios.

"Desafortunadamente, izquierda y violencia a menudo están estrechamente asociados en Grecia", dijo a IPS un veterano periodista que pidió no identificarse.

"No puedo comprender cómo la gente puede confundir violencia ciega con resistencia, o interpretar las ideas de izquierda de un modo tan destructivo y antisocial. Los partidos izquierdistas deberían crear nuevos espacios sociales, luchar contra el temor y los problemas sociales, no propagar más la oscuridad", sostuvo.

Pero grupos izquierdistas también han sido blanco de la violencia. El 24 de febrero, desconocidos intentaron arrojar una granada de mano en la planta baja de un edificio de Exarxeia que alberga a varias organizaciones políticas, entre ellas la Red para los Derechos Políticos y Sociales (Diktyo).

La granada rebotó en la ventana y explotó a la intemperie. En ese momento había 30 personas dentro de la habitación. El atacante fue visto cuando se escabullía conduciendo un vehículo.

"A partir de la información que tenemos, que incluye la interpretación de la policía, estas personas estaban preparadas para matar", dijo a IPS Nikos Giannopoulos, de Diktyo.

"El modo en que organizaron el ataque señala a paramilitares experimentados y no a jovencitos derechistas exaltados. No pensamos que esto sea simplemente un ataque contra nosotros, sino contra todos los involucrados en movimientos sociales, izquierdistas y anarquistas, y todos los que luchan por la justicia social en este país", agregó.

Los medios de comunicación dominantes no siguieron este ataque con la misma intensidad que los atribuidos a organizaciones de izquierda.

"El público ignora que, además de las llamadas 'sectas de revolucionarios', existe el comportamiento cruel y aterrorizante de agentes del Estado y el terrorismo 'negro' de los fascistas", escribió el columnista Petros Papakostandinou el día 1 en el periódico Kathimerini.

"El asesinato de Grigoropoulos, la brutalización de los estudiantes, la cooperación de la organización fascista Amanecer Dorado con miembros de la policía antidisturbios contra los manifestantes, los ataques contra el estudiante en Peristeri y el Diktyo en Exarxeia no fueron, probablemente, el resultado de acciones izquierdistas extremas", agregó.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe