Más mujeres en disciplinas científicas, objetivo de la educación inclusiva

Unos 200 delegados y representantes gubernamentales de más de 35 países de África, Asia y América Latina y el Caribe debatieron sobre cómo avanzar hacia una educación inclusiva de calidad
Datos de la Unesco destacan que solo son mujeres 35 por ciento de quienes estudian carreras de ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas en el mundo, las disciplinas conocidas como STEM, su sigla en inglés. Crédito: Joyce Chimbi / IPS

A la británica Anne-Maria Brennan le encantaba la ciencia cuando era niña. Pero en lugar de alentarla en esa vocación, quienes la rodeaban intentaron dirigirla en la «dirección correcta», que en aquel entonces era estudiar enfermería, magisterio o secretaría ejecutiva. “Me dijeron que las niñas no estudiaban física”, recordó.

«Esas voces eran tan fuertes que pensé seriamente en convertirme en profesora de música. Pero entonces alguien me dijo con sensatez que podía convertirme en científica y en música aficionada, porque no existía el ser científica aficionada y música profesional”, recordó en diálogo con IPS en Ciudad de Yibuti.

Eso sucedía en los años 70 del siglo pasado. Ahora esta doctora en biología es vicepresidenta de la no gubernamental Fundación para la Ciencia, la Tecnología y Civilización, de Gran Bretaña, junto con otras altas actividades académicas, después de ser profesora asociada en Biociencia y Biología Forense, en la Facultad de Ciencias Aplicadas de la Universidad South Bank de Londres.

«Resulta que las niñas podrían estudiar física, matemáticas, ciencia, tecnología e ingeniería», bromeó.

Han pasado cinco décadas desde que Brennan nadó contra la corriente, siguiendo una carrera científica.

Pero los datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) muestran que en todo el mundo solo son mujeres 35 por ciento de quienes estudian carreras de ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas (STEM, en inglés). Eso indica que las niñas siguen siendo orientadas hacia disciplinas sociales o del cuidado.

«El equilibrio de género en la inscripción, así como la inclusión tanto en la participación como en los logros en la educación STEM sigue siendo un desafío global para el Sur», dijo a IPS el profesor Kalu Mosto Onuoha, presidente de la Academia de Ciencias de Nigeria.

A su juicio, “los sistemas educativos nunca serán equilibrados e inclusivos cuando la mitad de la población no esté participando con sus contrapartes en la educación STEM».

Otros delegados de gobiernos de las regiones del Sur en desarrollo que entre el lunes 27 y este miércoles 29 han participado en la capital de Yibuti en III Cumbre Internacional sobre Educación Equilibrada e Inclusiva, coincidieron en la importancia de promover la igualdad de género en la enseñanza de las STEM.

Organizada por la Education Relief Foundation (ERF), con sede en Ginebra, más de 200 delegados y representantes gubernamentales de más de 35 países de África, Asia y América Latina y el Caribe debatieron sobre cómo avanzar hacia una formación inclusiva de calidad, con principios recogidos en la conclusiva Declaración Universal sobre una Educación Equilibrada e Inclusiva, con medidas prácticas para impulsarla.

La Unesco destaca que en materia de educación STEM, desafortunadamente, el punto del que se parte es de grandes retos, porque la baja representación femenina en las disciplinas científicas es un problema que cuesta revertir, según  su informe “Descifrar las claves: la educación de las mujeres y las niñas en el sistema STEM”.

Brennan afirmó en la cumbre en Ciudad de Yibuti que no solo en los países del Sur son bajos los números sobre la participación femenina en las disciplinas STEM, y que eso sucede también en países como el suyo, Gran Bretaña, pese a que se evidencian mejoras en los campos de la práctica general de medicina y la odontología, donde las mujeres han tomado la delantera.

La experta detalló que hay pocas mujeres en cirugía y aún menos en ingeniería porque los hombres en esas áreas se perciben como hostiles y los trabajos demasiado exigentes o de ambientes sucios.

«Estas amplias brechas de género en los países en desarrollo están puramente fuera de elección. Los estudiantes en estos países están optando por perseguir otros intereses. En los países en desarrollo, la elección es para nuestros estudiantes por una cultura patriarcal y a través de la socialización», dijo Onuoha.

El especialista nigeriano afirma que estas desigualdades tienen su origen en la exclusión y marginación de las niñas en la matrícula educativa.

«Se animó a las niñas, que eventualmente llegaron a la escuela a tomar asignaturas femeninas como la enseñanza. Fueron socializadas para creer que solo podían ser buenas madres si escogían asignaturas y disciplinas que se consideran menos exigentes”, explicó.

«En los países en desarrollo hay muchos esfuerzos concertados para abordar la primera parte del problema, aunque dolorosamente lento, estamos cerrando lentamente las brechas de género en la matrícula, la retención y, en algunos casos, los logros», dijo a IPS el profesor Mahouton Norbert Hounkonnou, de la Academia Nacional de Ciencias, Artes y Letras de Benín.

Hounkonnou es profesor titular de matemáticas y física, y pide la desmitificación de las ciencias. «La educación STEM se enseña como si solo unas pocas personas tuvieran la capacidad de comprender esos campos,  pero las ciencias y las matemáticas son para todos nosotros. Todos hacemos matemáticas diariamente sin siquiera saberlo», afirmó

El docente beninés subraya que los sistemas educativos equilibrados e inclusivos requieren una revisión de lo que se enseña en STEM, quién lo enseña y cómo se enseña.

«A los alumnos les encanta participar. Nuestras aulas deben ser más interactivas. También necesitamos un componente de género, que actualmente carece, en muchas de nuestras intervenciones educativas», agregó.

Llamó a invertir en infraestructura y material de aprendizaje para mejorar el entorno en el que se proporciona la educación STEM.

Hounkonnou pone de relieve que la mayoría de las escuelas en los países del Sur en desarrollo carecen de infraestructuras básicas e instalaciones para proporcionar entornos de aprendizaje efectivos.

Las investigaciones de la Unesco y otras agencias de la ONU muestran que los países del África subsahariana enfrentan en mayor medida ese tipo de desafíos. En los niveles de primaria y secundaria básica, menos de la mitad de las escuelas tienen acceso a electricidad, computadora e Internet.

«Este foro nos brinda la oportunidad de definir la forma que debe tener un sistema educativo STEM equilibrado e inclusivo, y hacer esfuerzos concertados para construir ese sistema. Se necesitarán recursos financieros y técnicos, incluida la capacitación de maestros para interactuar mejor con las alumnas», concluyó Hounkonnou.

T: MF

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe