África busca sus vacunas contra el coronavirus

Centros de investigación y la Organización Mundial de la Salud (OMS) urgen a las naciones de África para que participen en pruebas de cuatro vacunas que podrían enfrentar a la pandemia covid-19 en ese continente, destacó un informe de la revista científica Nature
Una trabajadora sanitaria toma la temperatura a pasajeros que arriban al aeropuerto de Brazzaville, Congo, combatiendo el avance de la covid-19 en África. En paralelo, una coaición de universidades y centros de investigación quiere probar fármacos en miles de personas hasta obtener una vacuna contra el flagelo. Foto: D. Elombat/OMS

Centros de investigación y la Organización Mundial de la Salud (OMS) urgen a las naciones de África para que participen en pruebas de cuatro vacunas que podrían enfrentar a la pandemia covid-19 en ese continente, destacó un informe de la revista científica Nature, que se edita en esta capital.

Ante el arribo del virus a África “la situación es que nos estamos quedando sin tiempo”, advirtió Nathalie Strub-Wourgaft, de la recién formada “Covid-19 Clinical Research Coalition”, una coalición de 70 centros de investigación y universidades de 30 países para trabajar en la investigación y prevención de la pandemia.

La coalición, con apoyo de fundaciones privadas y el respaldo de la OMS, busca acelerar la investigación clínica en países con sistemas de salud débiles, como la mayoría de los de África. Tedros Adhanom, director general d la OMS, bautizó la iniciativa como “Solidaridad”.

El plan consiste en comparar la efectividad de cuatro fármacos y combinaciones de fármacos en el tratamiento de covid-19. Al combinar los resultados de muchos estudios separados que se adhieren al mismo protocolo, la OMS espera obtener pruebas sólidas como resultado de un gran tamaño de muestra.

Las cuatro terapias elegidas por la OMS, algunas utilizadas ampliamente en África, son remdesivir, un medicamento antiviral experimental, cloroquina, utilizada para tratar la malaria, una combinación de lopinavir y ritonavir, empleada para tratar el sida, y esa combinación más interferón beta.

La organización está buscando reclutar varios miles de participantes. Los primeros participantes en el ensayo son de Europa, donde los países tienen algunos de los casos más altos de covid-19, pero hasta este lunes 6 el único país africano que se ha unido formalmente a la investigación es Sudáfrica.

Unos 25 países han expresado interés, y Burkina Faso y Senegal, deben ser los próximos inscritos en el programa. “Es importante tener tantos países como podamos”, insistió Michel Yao, gerente de programas de la OMS para la respuesta de emergencia en África.

De los más de 300 ensayos clínicos que se han lanzado para encontrar un tratamiento para covid-19, la mayoría se encuentran en China y Corea del Sur, y hay más en camino en la Unión Europea y Estados Unidos, pero muy pocos están ocurriendo en África, América Latina y el sur y sureste de Asia.

Los ensayos deben realizarse en países de bajos ingresos, según expertos citados por Nature, porque por ejemplo los pacientes en estos países pueden tener diferentes afecciones subyacentes y es importante saber si responden a los medicamentos de manera diferente, en comparación con los de las naciones de mayores ingresos.

“Hay muchas preguntas sobre este virus, especialmente en lo que respecta a nosotros en África», dijo Chinwe Ochu, del Centro de Nigeria para Control de Enfermedades en Abuja. Por ejemplo “todavía tenemos una falta de datos entre la asociación de altas temperaturas y humedad sobre el impacto de la propagación”.

Además “es imposible estudiar el brote en África sin tener en cuenta determinantes socioeconómicos, como la atención médica, el acceso al agua, el clima y la geografía”, dijo Ochu.

Strub-Wourgaft advirtió que las drogas para los tratamientos podrían ser difíciles de obtener debido a la previsible mayor demanda en los países ricos, además de las dificultades para la administración de medicamentos en las zonas rurales.

Entre las entidades africanas que ya se incorporaron a las tareas está el Centro Nacional de Investigaciones de Egipto, y el Instituto de Iniciativa de Vacunas de la keniana Universidad de Nairobi.

A-E/HM

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