El acuerdo comercial y de ayuda entre la Unión Europea (UE) y 71 países de Africa, el Caribe y el Pacífico (ACP) que sustituye a las convenciones de Lomé no adopta como prioridad la erradicación de la pobreza ni incluye a la sociedad civil, advirtió una destacada asociación de ONG europeas.
El acuerdo de Suva, así llamado porque se firmará en la capital de Fiji el 8 de junio, fija las pautas que regirán la cooperación entre la UE y ACP al menos durante el próximo quinquenio.
Un informe divulgado este lunes por Eurostep, un grupo de 22 ONG (organizaciones no gubernamentales) europeas, señala que "el desigual equilibrio de poder entre las dos partes significó que, en el pasado, cuando no hubo disposiciones precisas del acuerdo marco… primaron las interpretaciones y definiciones de la UE".
Dada la importancia y el significado de los textos complementarios del acuerdo, Eurostep considera fundamental que todos los documentos producidos se divulguen a todas las partes del acuerdo, incluso a la sociedad civil, preferiblemente a través de la Internet.
En la Cumbre Mundial de Desarrollo Social de las Naciones Unidas y en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebradas en Copenhague y en Beijing respectivamente en 1995, jefes de estado y de gobierno acordaron que la erradicación de la pobreza fuera la meta de la cooperación para el desarrollo.
El acuerdo de Suva menciona tanto a la reducción como a la erradicación de la pobreza, según Eurostep.
Las relaciones entre ACP y la UE se "centrarán en el objetivo de reducir y finalmente erradicar la pobreza de conformidad con los objetivos del desarrollo sustentable y la gradual integración de los países de ACP en la economía mundial", destaca.
Para cumplir con este objetivo final, Eurostep propone varios puntos para mejorar la capacidad de las economías de ACP para responder a las necesidades de sus poblaciones.
Los futuros textos de referencia del acuerdo deben incluir una estrategia que demuestre cómo las políticas y programas del mismo, incluso aquellas dirigidas a la integración en la economía mundial, combaten la pobreza nacional e internacional, recomiendan.
Ambas partes deben asegurar que las Estrategias de Apoyo a los Países y los Programas Nacionales Indicativos del Acuerdo, instrumentos formales del mismo, se implementen de manera que conduzca a la "erradicación de la pobreza", según Eurostep.
"Sin embargo, en la práctica el principio de asociación… sigue siendo una palabra más en lugar de una verdadera expresión de la cooperación entre ACP y UE", según las ONG.
Aunque el inevitable desequilibrio en la relación siempre será difícil de superar, Eurostep cree que el diálogo con las instituciones europeas y el reconocimiento de los diferentes papeles, responsabilidades y limitaciones de las partes en cuestión podría contribuir con un cumplimiento más efectivo del principio de asociación.
"Sin embargo, varios mecanismos y medidas incluidas en el Acuerdo no reflejan ese equilibrio", agrega.
"En principio, los estados de ACP tienen la principal responsabilidad de definir sus estrategias y programas, pero en la práctica la tarea de redactar los programas de estrategia y los programas la asumió la UE", sostuvo.
Eurostep menciona el ejemplo del mecanismo de consulta para los elementos esenciales y fundamentales del acuerdo que, si no se cumplen, pueden hacer que la UE suspenda su financiación, como ocurrió con Togo porque no se celebraron elecciones libres y justas.
En este proceso, las consultas se realizan entre un país de ACP por un lado, y los 15 estados miembros de la UE, por el otro.
El acuerdo también estipula que los "representantes de la sociedad civil estarán asociados con este diálogo", pero el papel de este sector sigue siendo indefinido, según Eurostep.
El documento pide que la sociedad civil tenga un rol claramente definido para cumplir los objetivos de los Programas Nacionales Indicativos, y que ambas partes mejoren la cantidad y la calidad del personal especializado en cooperación con actores de la sociedad civil.
El Acuerdo Suva incluye disposiciones destinadas a asegurar la coherencia de las políticas de la UE.
Pero Eurostep sostiene que, a pesar de años de "pruebas documentadas de los efectos perniciosos de las políticas (europeas) sobre la erradicación de la pobreza en los países de ACP", disposiciones similares sobre la coherencia en las anteriores convenciones de Lomé nunca se aplicaron.
Eurostep recomienda la creación de una oficina especial dedicada a vigilar la coherencia en la labor de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, que controlaría las políticas y su aplicación, y que deberá informar a los estados de ACP toda consecuencia para sus intereses de acciones europeas. (FIN/IPS/tra-en/bk/da/aq/dv/00
