Cada día, en los países del Sur en desarrollo 20 000 niñas y adolescentes dan a luz, lo que se traduce en que 7,3 millones de nacimientos anuales son de madres menores de 18 años, mientras que las complicaciones del embarazo y el parto siguen como la mayor causa de muerte de este grupo de mujeres.
Los más de 6 000 delegados, congregados en la capital de Kenia en la 25 Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (CIPD25), tienen ante sí alcanzar compromisos que renueven y redoblen las promesas hechas a las niñas y mujeres hace 25 años en El Cairo.
Llevar a cero las muertes maternas prevenibles, eliminar la violencia de género y satisfacer las necesidades de planificación familiar, los tres grandes compromisos de la 25 Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (CIPS25), requieren, además de voluntad política, de dinero, mucho dinero.
Al menos 830 mujeres mueren cada día por causas evitables, 33 000 niñas se ven obligadas a contraer matrimonio infantil y otras 11 000 niñas son sometidas a mutilación genital femenina. Estas son algunas de las crueles realidades que enfrentan las mujeres jóvenes a diario.