Cada día 4000 personas o más cruzan la frontera occidental de Etiopía y entran a Sudán, huyendo de los combates en el estado etíope de Tigray entre fuerzas regionales y del gobierno central, según dijeron, este martes 17, varias agencias de las Naciones Unidas en esta ciudad suiza.
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió este viernes 6 detener la violencia en las regiones etíopes de Tigray y Oromía, y llamó a las partes a resolver sus diferencias mediante el diálogo pacífico.
La autoestima colectiva de Etiopía vive un momento dulce al verse como centro de la atención mundial por una razón, en esta ocasión, positiva: la concesión a su primer ministro, el dinámico Abiy Ahmed, del Premio Nobel de la Paz 2019. Pero especialistas y ciudadanos coinciden en que el galardón llega cuando el gobernante afronta difíciles desafíos para él y para el país.
Eritrea tiene los niveles de censura más altos del mundo y el gobierno más propenso a encarcelar a periodistas y suprimir medios de comunicación independientes, según un nuevo informe del Comité para la Protección de Periodistas (CPJ).
Etiopía sorprendió con el anuncio de que estaba dispuesta a cumplir e implementar el Acuerdo de Paz de Argel para regularizar la situación en esta ciudad fronteriza de Badme, sinónimo del conflicto con Eritrea.
Poco después de medianoche, un avión procedente de Arabia Saudita aterriza en Adis Abeba. De él descienden trabajadores que fueron expulsados, y que antes se habían ido de Etiopía para buscar empleo en un reino rebosante de riqueza petrolera.
El periodista eritreo Estifo estuvo siete años ahorrando para pagarle a una persona que lo trasladara junto a su familia de la capital de Eritrea a la frontera con Etiopía. Una vez del otro lado, presentó una solicitud de asilo a las autoridades de este país.
El patio del centro del Servicio Jesuita para los Refugiados (SJR) en la capital etíope está lleno de gente que asiste a un taller de recepción del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), viene a retirar provisiones básicas, asiste a alguna clase o juega al voleibol, el tenis de mesa o el dominó.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró que 2015 ya es “el año más mortal” para millones de migrantes y solicitantes de asilo que huyen de situaciones de guerra y persecución en sus países de origen. Pero Pakistán da refugio seguro.
Al conmemorarse el sábado 11 el Día Mundial de la Población, la ONU se encuentra enfrascada en una batalla prácticamente perdida contra las emergencias humanitarias causadas por los conflictos armados, que alejan a millones de personas de sus hogares y las convierten en refugiadas.
Si bien la tecnología otorgó mayor libertad para expresarse a millones de personas, en los 10 países con mayor censura del mundo ese derecho básico solo existe en la letra, si es que existe.
"El número insoportable de vidas perdidas en el mar no hará más que crecer si la Unión Europea no actúa ahora para garantizar las operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo”, advirtió Human Rights Watch (HRW).