Cuando la Organización de las Naciones Unidas (ONU) gastó más de 2.200 millones de dólares en la renovación de su emblemática sede en Nueva York, que ya tiene 65 años, uno de sus principales objetivos era reforzar la seguridad para evitar que el edificio de 36 pisos sufriera atentados.
Las personas muertas por el terremoto que devastó a Nepal el sábado 25 podrían superar las 10.000, según estimaciones del primer ministro Sushil Koirala, aunque las cifras oficiales de pérdidas humanas se sitúan aún en la mitad y la de heridos en 7.000.
Las crisis de refugiados de Siria e Iraq amenazan con desbordarse hasta Libia y Yemen, mientras que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se prepara para la primera Cumbre Mundial Humanitaria, que tendrá lugar en la ciudad turca de Estambul en mayo de 2016.
La población de Siria es “víctima de la peor crisis humanitaria de nuestro tiempo", aseguró el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, cuando solicitó fondos por esa causa a 78 donantes potenciales en el palacio Bayan de la capital de Kuwait.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), con problemas financieros, se esfuerza por llevar alimentos, medicamentos y dar refugio a millones de refugiados sirios, pero le urgen más recursos para continuar el trabajo y atender a las víctimas.
Cuando se detectan episodios de violencia sexual, contra hombres, mujeres o menores de edad, en las misiones de paz de la ONU, esta no demora en identificar a los responsables y expulsarlos a sus países de origen. Pero prácticamente no puede hacer nada para procesarlos, hacer justicia o asegurar una adecuada indemnización a las víctimas.
Los problemas más graves que deberá enfrentar en 2014 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) son las guerras civiles de Siria y República Centroafricana, pero también los conflictos de Malí, la región sudanesa de Darfur, Libia y Palestina.
Las operaciones de ayuda en las áreas azotadas por el tifón Haiyán en Filipinas se aceleraron este miércoles 13, pero los sobrevivientes todavía reciben cantidades mínimas de agua, alimentos y suministros médicos.