El tributil estaño (TBT), producto empleado en todo el mundo desde la década de 1960 para prevenir la adhesión de organismos marinos en superficies y evitar su crecimiento, ha sido detectado en
áreas marinas protegidas de América Latina en niveles suficientes como para alterar el normal funcionamiento de la biota local.
Cuando sus amigos lo presionaron para que usara una aplicación agrícola en julio, el agricultor de arroz Mustafa descargó a regañadientes RiTx Bertani en su teléfono inteligente. Cuatro meses después, se siente feliz de haber probado la tecnología.
Superar la brecha digital mediante el uso de prácticas de la inteligencia artificial aplicadas a la agricultura con el objeto de hacer frente a la inseguridad alimentaria es parte de un creciente debate que busca simultáneamente salvaguardar los recursos naturales y abordar las dificultades generadas por el cambio climático y las repercusiones causadas por la pandemia de covid-19.
América Latina ya ha perdido más de 40 por ciento de servicios naturales o ecosistémicos proporcionados por los mamíferos, y el proceso se está acelerando con graves consecuencias para los bosques y las personas que los habitan, halló un nuevo estudio.
Más personas y por más tiempo interactúan en los espacios digitales de América Latina por la pandemia de covid-19, pese a la brecha en el área, lo que disparó la exposición a la violencia en línea para el caso de las mujeres, según activistas y especialistas.
La aprobación de un nuevo trigo
transgénico en Argentina y un proyecto de decreto presidencial en México que habilita el uso de
glifosato y de maíz transgénico generaron la reacción de científicos de la región latinoamericana ante la posibilidad de que se amplíe el uso de transgénicos en el continente.
La comunidad científica peruana aguarda expectante la decisión del presidente Martín Vizcarra en torno a la ampliación por 15 años más de la moratoria aprobada en 2011 que prohibía, por una década, el ingreso a territorio nacional de organismos genéticamente modificados.
Y en eso llegó la covid-19.
En lo que va del siglo XXI, investigadores, decisores, tecnólogos, gobiernos nacionales, estábamos entusiasmados con los avances de la Sociedad del Conocimiento en los países de América Latina y el Caribe. El panorama era promisorio: en 2019, la región ocupaban el cuarto lugar en cuanto a usuarios de Internet, detrás de Asia, Europa y África.
En la Argentina, los grupos sociales en situación de pobreza, los que viven en zonas rurales y las personas mayores no pueden acceder a Internet y a las tecnologías digitales. Puede ser por el costo del servicio, la ausencia de empresas proveedoras o por carecer de los dispositivos y de las competencias para apropiarse de los mismos.
Cuando surgió la amenaza de una pandemia de covid-19 a principios de año,
muchos temieron sus efectos en África. La preocupación por la combinación de sistemas de salud sobrecargados e insuficientemente financiados, y la carga ya existente de enfermedades infecciosas y no infecciosas, consiguieron que con frecuencia
se hablara de ello en términos apocalípticos.
En América Latina y el Caribe las
mujeres representan 35 por ciento de quienes estudian carreras de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), destacadas como “empleos del futuro” y motor del
desarrollo sostenible.
La transformación digital en la región puede ser un instrumento eficaz para el desarrollo solo si es universal e inclusiva, planteó el informe Perspectivas Económicas de América Latina 2020 difundido este jueves 24 por cuatro organismos internacionales.
En las últimas semanas se ha visto una dramática escalada en la postura de Estados Unidos hacia las empresas de tecnología de la República Popular China. Después de perseguir a la empresa de infraestructura Huawei durante años y a la aplicación de la red social TikTok durante semanas, el secretario de Estado, Mike Pompeo,
publicó un comunicado de prensa que generó escalofríos y rechazo dentro de la comunidad de la internet abierta.
¿Recordará la historia la pandemia de covid-19 como el momento en que los ciudadanos renunciaron a sus derechos civiles por motivos de salud?
Duramente castigada por la covid-19, América Latina busca participar en la carrera hacia una vacuna contra el coronavirus ya sea asociándose a proyectos avanzados de países de mayor desarrollo o con iniciativas propias, como es el caso de Cuba.
Existe una preocupación creciente por el aumento progresivo de las expresiones, de
deepfake, realizadas con programas cada vez más accesibles y fáciles de usar, al alcance de cualquiera que quiera producirlos con fines de entretenimiento, acoso, chantaje, propagandísticos, para construir una crítica política o para generar desinformación o
fake news.
En pleno auge del movimiento
Black lives matter (las vidas de los negros importan) está surgiendo un período de reflexión global sobre la discriminación racial. Nos preguntamos: ¿cómo influye la Inteligencia Artificial (IA) en este tema?