América Latina y el Caribe es la región del mundo en desarrollo más golpeada por la crisis derivada de la pandemia covid-19 y su economía experimenta el mayor retroceso en 120 años, una caída del producto interno bruto de -7,7 por ciento, indicó el balance preliminar para 2020 entregado este miércoles 16 por la Cepal.
Las recesiones generadas por la covid-19 han afectado a la mayoría de los países y han requerido respuestas fiscales masivas. Si bien la mayoría de los países en desarrollo luchaban contra una deuda creciente incluso antes de la pandemia, muchos países industrializados también enfrentan presiones macroeconómicas sin precedentes a pesar de los recortes de gastos anteriores debido a las políticas de "consolidación fiscal".
Brasil y su gobierno se distraen con las elecciones municipales del 15 de noviembre y las peleas sobre la vacuna anticovid-19, sin prepararse para la tempestad social contenida en los dilemas económicos del país.
La pandemia de covid-19 sigue propagándose, con la trágica pérdida hasta el momento de más de un millón de vidas.
La convivencia con el nuevo coronavirus ha supuesto un reto sin igual, aunque el mundo se está adaptando.
América Latina y el Caribe está ante otra década perdida, porque la crisis causada por la pandemia covid-19 se prolongará más de lo esperado y la recuperación demorará años, según el estudio económico sobre la región presentado este martes 6 por la Cepal.
La pandemia de covid-19 ha empujado los niveles de deuda hasta nuevos máximos.
En comparación con finales de 2019, se proyecta que los coeficientes de endeudamiento promedio en 2021 aumenten un 20% del PIB en las economías avanzadas, un 10% del PIB en las economías de mercados emergentes y aproximadamente 7% en los países de bajo ingreso.
El producto interno bruto de América Latina caerá -9,1 por ciento en 2020 y su nivel per cápita será similar al observado en 2010, lo que significa un retroceso económico de 10 años, expuso este miércoles 15 un nuevo informe de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).
El panorama económico y de salud de América Latina y del Caribe quedó cubierto de nubarrones para el resto de 2020, y su recuperación será lenta en 2021, según informes coincidentes de organismos multilaterales con datos críticos sobre la recesión y la pandemia covid-19.
La pandemia de covid-19 empujó las economías a un Gran Confinamiento, que contribuyó a contener el virus y salvar vidas, pero también desencadenó la peor recesión desde la Gran Depresión.
Según las previsiones de los principales organismos regionales e internacionales, la región
América Latina y el Caribe (ALC) será la más afectada por la pandemia de la covid-19 en términos económicos y sociales.
La economía de Asia apenas crecerá este año 0,1 por ciento, la cifra más baja desde 1961, aunque se recuperará sobre seis por ciento en 2021, estimó el Banco Asiático de Desarrollo (BAD) en un informe divulgado este jueves 18 para corregir previsiones que hizo en abril.
“El panorama no es nada alentador, desempleo, nuevos pobres, caída del consumo…”, Gerardo Marín no cambia su expresión fría e impasible, tampoco al supervisar el trabajo en su local. Desde 1917 su familia vende huevos cerca del mercado de San Juan, en el centro de la Ciudad de México. Surte a restaurantes y hoteles de la capital.
Las remesas que sostienen a millones de hogares en América Latina y el Caribe se derrumban porque sus familiares pierden empleos e ingresos en los países de acogida, y el conjunto familiar retrocede hacia la pobreza, al superponerse la crisis de salud por la covid-19 y la recesión económica mundial.
Los gobiernos de la región deben instrumentar urgentemente, ante la pandemia covid-19, un ingreso básico de emergencia para sus 215 millones de pobres, propuso la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Es verdad que la historia registra antes el paso devastador de grandes pandemias, pero ninguna irrumpió en un mundo tan poblado (más de 7700 millones de personas) ni tan interconectado y con un planeta ambientalmente enfermo. Es la mayor crisis humana y de salud que hemos encarado.
Las Naciones Unidas, tomando la palabra al Grupo de los 20 (G20) países industriales y emergentes, de “hacer lo que sea necesario para superar la pandemia” de la covid-19, presentó este lunes 30 un primer plan de 2,5 billones de dólares para que ese empeño de los ricos alcance a los restantes 6000 millones de personas más desfavorecidas del planeta.
Mientras ministros de finanzas y economistas llegan a Washington para afrontar los desafíos económicos mundiales, en las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial, la mayoría de la población mundial vive con recortes de austeridad y ve cómo se deteriora su nivel de vida.