Una joven empresa de Jamaica comenzó a convertir el sargazo, las grandes algas que obstruyen pesca, turismo y arrecifes en las costas del Caribe, en alimentos concentrados para animales y en combustible para cocinar.
El ingeniero industrial Ancel Bhagwandeen cree que cultivar alimentos en interiores es una gran idea para salvarlos de las inclemencias del cambio climático. Por eso desarrolló un sistema hidropónico que “aprovecha los nanoclimas en las casas”, para que estas protejan las siembras “del mismo modo que a nosotros”, dijo.