Finalmente ya hay fecha de arranque para el ordenamiento monetario en Cuba, con sus múltiples y complejos impactos en las empresas estatales, el sector privado y la ciudadanía, al desencadenar un conjunto de procesos que deben reimpulsar el plan de reformas económicas aprobado hace casi una década.
Urgida por un incremento de la producción de alimentos, aumentar las exportaciones y estimular fuentes de empleo, Cuba acaba de establecer una nueva Política para Impulsar el Desarrollo Territorial, que aspira a incentivar el crecimiento económico mediante el aprovechamiento de los recursos locales.
Las cooperativas de pequeños campesinos mayas que producen cardamomo orgánico contribuyen a sostener la cobertura forestal de Guatemala, a la vez que participan de la bonanza de precios y demanda de su producto en India y el Medio Oriente.
En lo tocante al desarrollo, el sector agropecuario tiene varias funciones importantes que cumplir, entre ellas: proveer de alimentos a la población, abastecer de materias primas a la industria procesadora, generar divisas a través de las exportaciones y liberar divisas a partir de la sustitución de importaciones. Además, es un sector que genera empleos y que permite el desarrollo de las comunidades donde tiene lugar.
En la pequeña parcela La Cañada, en la periferia de la capital de Cuba, participantes del VII Encuentro Internacional de Agroecología, Agricultura Sostenible y Cooperativismo se interesaron por cómo al productor Wilfredo Pérez elabora sus propios fertilizantes ecológicos.
Marta Cairo coloca una gruesa capa de ramas de almacigo sobre una caja de mangos, para que maduren rápido y puedan procesarlos en la pequeña fábrica de conservas La Ignacita, en el municipio de San Miguel Padrón, en la periferia de la capital de Cuba.
En República Dominicana, la falta de oportunidades, la poca información y la falta de conocimientos técnicos condenan a muchas mujeres rurales a permanecer en sus viviendas, sin poder ejercer su autonomía y haciéndose cargo de trabajo no remunerado.
“Me irritaba que una empresa de fuera de la región ganara dinero con energía renovable y me preguntaba por qué la gente no se involucraba” en el tema, rememora la alemana Petra Gruner-Bauer, presidenta de la cooperativa Solix Energie.
Potenciar la internacionalización de los productos de las pequeñas y medianas empresas (pymes) agrícolas y agricultura familiar es clave para avanzar hacia el comercio inclusivo y el desarrollo rural en América Latina y el Caribe, señaló este martes 12 la FAO.
Desde hace años corre la voz entre los activistas de que se modificará la ley que regula a las organizaciones no gubernamentales en Cuba, un soplo de esperanza para quienes se ven forzados a operar ilegalmente a la espera de reglas más flexibles.
La ampliación del cooperativismo dentro del programa de reformas de Cuba se abre paso en medio de la cautela del gobierno, que al mismo tiempo da señales de preferir esta alternativa para fortalecer el incipiente sector privado, a otras como las pequeñas y medianas empresas (pymes).
Estados Unidos reitera su interés por comprar alimentos orgánicos cubanos en cuanto el acercamiento entre los dos países lo permita. Cuando ese día llegue, el sector agroecológico en la isla podría no estar preparado, alertan sus protagonistas.
Las medidas para transformar la agricultura cubana continúan sin dar los frutos esperados, para descontento de los consumidores, por la carestía de los alimentos, y también de las autoridades, que están urgidas de que se incremente la producción local, para reducir el costo de las importaciones.
La elevada pobreza, la disminución en la superficie de la tierra y el clima cambiante obligaron a los agricultores de la zona de Tangakona, en el oeste de Kenia, a adoptar una iniciativa comercial cooperativa para mejorar sus medios de vida.
En el oeste del estado de Pará, en el norte de Brasil, la construcción de un complejo logístico portuario, destinado a exportar soja a través de la cuenca amazónica, expulsó a miles de campesinos de sus tierras, que ahora se dedican a ese monocultivo.
Puñal en mano, Domitila Reyes abre de un tajo las capas de las hojas que cubren la mazorca de maíz, que arranca de la planta con cuidado en un proceso que repite toda la mañana, en medio de un mar de plantas de este cereal esencial en la dieta de los salvadoreños.
“Esa ley debería estar vigente desde el fin de la esclavitud, que echó a la calle a los esclavos sin darles condiciones de trabajar y producir, convirtiéndolos en semiesclavos”, evaluó el agricultor brasileño Idevan Correa.