Los efectos de la pandemia actual por la covid-19 afectan de manera desigual a la población y aquellas personas que se encuentran en las intersecciones de diferentes desigualdades (género, pobreza, etnia u orientación sexual) son las que se están viendo más perjudicadas.
Cuatro agencias de las Naciones Unidas pidieron este jueves 22 a la Cámara de Diputados de la nación mexicana que reforme leyes para prohibir los castigos corporales a que son sometidos los niños, niñas y adolescentes en los hogares.
La crisis de la pandemia covid-19 cobra un alto precio en personas y economías, pero el mayor impacto está en la salud y el empleo de millones de mujeres, señaló un informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNPFA).
El confinamiento al que se ha visto forzada buena parte de la humanidad para responder a la pandemia de covid-19 obstaculiza las intervenciones que se realizan en todo el mundo para frenar el matrimonio infantil y podrían contribuir a un aumento considerable en esta situación entre 2020 y 2030.
Llevar a cero las muertes maternas prevenibles, eliminar la violencia de género y satisfacer las necesidades de planificación familiar, los tres grandes compromisos de la 25 Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (CIPS25), requieren, además de voluntad política, de dinero, mucho dinero.
Al menos 830 mujeres mueren cada día por causas evitables, 33 000 niñas se ven obligadas a contraer matrimonio infantil y otras 11 000 niñas son sometidas a mutilación genital femenina. Estas son algunas de las crueles realidades que enfrentan las mujeres jóvenes a diario.
La cruzada contra la educación integral en sexualidad (EIS) entablada por sectores conservadores y religiosos, socava avances en Latinoamérica y podría agravar índices de embarazos precoces, enfermedades transmisibles y abuso contra niñas y adolescentes.
América Latina y el Caribe ha sido una de las regiones más afectadas por el matrimonio infantil. De acuerdo con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), hasta 2012, las niñas latinoamericanas que se casaban siendo menores de edad representaban 29 por ciento del total.
Hace ahora unos años alguien compartió conmigo un video que me impactó profundamente. Se llamaba “El Efecto Niña”. El video reproduce en tres minutos el destino de millones de niñas y adolescentes en el mundo.
Esta es una historia que no debería tener que escribirse - la de cientos de millones de dadoras de vida cuya producción y productividad han sido sistemáticamente cuantificadas en pormenorizadas estadísticas, pero cuya abnegación, sufrimiento humano y denegación de derechos solo son objeto de palabras.
En un lenguaje directo, un video argentino explica a los adolescentes como vivir el sexo con placer y al mismo tiempo con cuidado. Una campaña sin tabúes, muy necesaria en los países de América Latina donde una de cada cinco mujeres son madres antes de los 19 años.
Este año, los países ricos donarán 140 millones de dólares menos al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, en inglés), una organización clave para la salud materna y la promoción de los derechos reproductivos de millones de mujeres en todo el mundo.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) está decidida a acabar con la mutilación genital femenina (MGF), un ritual practicado principalmente en África, Medio Oriente, partes de Asia e incluso en algunas comunidades de inmigrantes en Europa.
Una mujer corpulenta prepara ramos de rosas amarillas en el mercado callejero de Pequeño Haití, un barrio precario de la capital de República Dominicana. “No quiero hablar, no tome fotos”, pide a IPS esta trabajadora, acompañada de una niña que parece ser su hija.
El 6 de noviembre de 2015 conocimos a la primera dama de Kenia, Margaret Kenyatta, una incansable defensora de las mujeres, las niñas y los niños, durante el lanzamiento de una campaña del UNFPA en el condado de Mandera, en el noreste de este país africano.
Los países de América Latina cumplieron, parcialmente y con altibajos, el Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) referido a la lucha contra el VIH/sida, según se desprende del informe que Onusida publicó este martes 14 sobre el estado mundial de la epidemia.
Al conmemorarse el sábado 11 el Día Mundial de la Población, la ONU se encuentra enfrascada en una batalla prácticamente perdida contra las emergencias humanitarias causadas por los conflictos armados, que alejan a millones de personas de sus hogares y las convierten en refugiadas.