moratoria

Foto: Cory Hancock/FMI

Un largo, desigual e incierto camino cuesta arriba

La pandemia de covid-19 sigue propagándose, con la trágica pérdida hasta el momento de más de un millón de vidas. La convivencia con el nuevo coronavirus ha supuesto un reto sin igual, aunque el mundo se está adaptando.

Muro exterior de la prisión de Welikada, en Colombo, la capital de Sri Lanka, donde su presidente, Maithripala Sirisena, anunció el restablecimiento de la aplicación de la pena de muerte, tras 40 años suspendida, para los condenados por delitos de drogas. Crédito: Ranmali Bandarage / IPS

Nadie “merece morir” o la injusticia de la pena de muerte

La buena noticia es que su aplicación ha disminuido, pero la mala sigue siendo que el uso «inhumano» de la pena de muerte se mantiene excesivamente común en todo el mundo, reiteró Amnistía Internacional en su último pronunciamiento al respecto.