Twitter y Facebook bloquearon publicaciones de Donald Trump y suspendieron su cuenta. El aún presidente de Estados Unidos es antidemocrático, su trayectoria política no deja dudas. Sin embargo, la preservación de la democracia deben hacerla las instituciones públicas, no las corporaciones. En ese sentido, por más simpática y justa que parezca la censura a Trump en medio de una instigación al golpe de Estado, es un antecedente peligroso.
El martes 29 de septiembre por la noche fue el primer debate entre los dos candidatos presidenciales de Estados Unidos para las elecciones del 3 de noviembre. Causó opiniones divididas. Para muchos, el candidato demócrata Joe Biden obtuvo la victoria por mantener la cordura y demostrar decencia. Otros creen que fue Donald Trump quien ganó al lograr confundir, distraer y amedrentar a su oponente.
Existe una preocupación creciente por el aumento progresivo de las expresiones, de
deepfake, realizadas con programas cada vez más accesibles y fáciles de usar, al alcance de cualquiera que quiera producirlos con fines de entretenimiento, acoso, chantaje, propagandísticos, para construir una crítica política o para generar desinformación o
fake news.
Felipe Neto, un fenómeno de la comunicación, con 39 millones de inscritos en su canal en YouTube, se puso en el centro de la guerra de difamación por redes sociales que envenena la política y la vida en Brasil.
El jamaicano Usain Bolt, el hombre más rápido que jamás ha existido, se sumó a la lucha global contra el hambre, haciendo un llamado a todos a “correr juntos por un mundo sin hambre”.
En un video de un músico keniata, dos jóvenes parejas, una de hombres y la otra de mujeres, pasean de la mano por un parque de Nairobi. La evolución de su amor, desde besos hasta escenas más sexuales, se muestra junto a imágenes de titulares y protestas contra los homosexuales, principalmente de Kenia y Uganda.
Si leemos los titulares o vemos el último clip aterrador en Youtube este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, no parece buen momento para celebrar la igualdad de las mujeres.
Para la mayoría de las mujeres sirias, la guerra ha sido un desastre. Para otras, sin embargo, también ha sido una experiencia liberadora.
Es un título perfecto para cualquier sitio digital de noticias satíricas. “Jóvenes iraníes son arrestados por ser demasiado felices en Teherán”, destacó un blog en el diario New York Times, mientras que otros medios de comunicación publicaron artículos similares en todo el mundo.
El Oscar a Mejor Actriz de Reparto para la keniata Lupita Nyong’o en la aclamada película “Doce años de esclavitud” genera esperanzas de que la incipiente industria del entretenimiento de su país reciba el impulso que tanto necesita.
Ben Okoth, de 45 años, nació y creció en Kibera, el mayor tugurio de África, en las afueras de Nairobi. A lo largo de los años conoció a muchas organizaciones no gubernamentales (ONG) que trabajaban para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, pero también a las que utilizan el barrio como “máquina de hacer dinero”.
Primero fue YouTube. Ahora, si el gobierno de Sindh se sale con la suya, quedarían inhabilitados Skype, WhatsApp, Viber y Tango para la población de esta sudoriental provincia pakistaní, al menos por tres meses.